Vamos a preparar una lasaña de carne, a la que en lugar de salsa bechamel, le pondremos una salsa de queso, que la va a hacer más ligera y además es facilísima de preparar. Probadla, comprobareis que el resultado no desmerece nada a la clásica de salsa bechamel.
- 1 envase de láminas de lasaña precocidas
- medio Kg de carne picada (vaca, cerdo, cordero, la que se prefiera)
- 1 cebolla
- 1 pimiento rojo o verde pequeño
- 1 calabacín pequeño
- 1 berenjena pequeña
- 750 grs de tomates maduros
- 1 yogur griego natural
- 1 huevo
- 50 gr queso feta
- 100 grs queso rallado
- mantequilla para engrasar el molde.
- aceite, sal.
Seguir las indicaciones del envase de lasaña para preparar las láminas.
Mientras se rehidratan, ir preparando el relleno. Lavar bien y trocear todas las verduras (el calabacín y berenjena se trocean con su piel). Rallar o picar finos los tomates. Se pone en una sartén el aceite a calentar y se hace una salsa tipo pisto, con todas las verduras bien pochaditas hasta que quede una salsa espesa, sazonar si no se ha hecho antes. Una alternativa, si tenemos prisa, es utilizar pisto envasado, los hay muy aceptables. Añadir a la salsa de verduras la carne picada y dar unas vueltas, no es necesario cocinarla mucho, ya que se reseca.
Por otro lado, mezclar en un bol, 1 huevo entero, 50 grs de queso feta griego desmenuzado y 1 yogur griego tipo natural sin azucar para hacer la salsa griega.
Para montar la lasaña, engrasar con mantequilla un recipiente resistente al horno e ir poniendo alternativamente, láminas de lasaña y de relleno. Al final verter la salsa por encima y el queso rallado.
Cocinar en el horno a 180ªC durante 40 min aproximadamente, hasta que esté la salsa cuajada y la superficie con el queso dorada .Dejar reposar para que se asiente, luego se podrá recalentar sin problemas.
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